La pérdida de dientes aumenta el riesgo de demencia

La pérdida de dientes en personas mayores puede incrementar la posibilidad de sufrir demencia, según un nuevo estudio realizado en la Universidad nipona de Kyushu.

Este estudio ha demostrado que las personas mayores de 60 años que mantienen la mayoría de los dientes tienen menos probabilidades de desarrollar demencia. Asimismo, el riesgo de sufrir demencia aumenta junto con el número de dientes perdidos después de esta edad, según los investigadores.

El estudio involucró a 1.566 adultos japoneses libres de demencia al inicio. Posteriormente, continuó durante 5 años entre 2007 y 2012. Al inicio, los participantes se dividían en cuatro categorías según su número de dientes.

Durante un promedio de 5 años, el 11,5% de los voluntarios desarrollaron algún tipo de demencia, incluyendo la enfermedad de Alzheimer y la demencia vascular, que sucede cuando parte del cerebro no recibe la sangre suficiente.

Los investigadores vieron que las probabilidades de desarrollar demencia aumentaron un 62% en aquellos participantes que tenían entre 10 y 19 dientes, en comparación con aquellos que tenían 20 o más. Este riesgo adicional se elevó al 81% para aquellos que tenían entre uno y nueve dientes.

Pero, ¿por qué está relacionada la pérdida de dientes y la demencia? Los investigadores sugieren que una posible explicación es que la caries y la enfermedad de las encías podría desencadenar la inflamación crónica, algo que aumenta las posibilidades de tener Alzheimer y demencia.

Además, la pérdida de dientes podría reflejar una falta general de cuidado y hábitos saludables a lo largo de la vida de una persona.

Por último, aseguran que masticar aumenta el flujo sanguíneo y los niveles de oxígeno en la sangre, y la gente con pocos dientes tienen más dificultades para hacer esto.

Los autores del estudio, publicado en el Journal of the American Geriatrics Society, concluyen: «Los hallazgos enfatizan la importancia clínica de promover la prevención en la salud dental, especialmente en términos de mantenimiento de los dientes desde una edad temprana, para reducir el riesgo de demencia en la vida posterior «.

Fuente original: WebMD.